La jornada 13 de la Liga Hypermotion se cerraba en El Plantío con el encuentro entre el Burgos CF y el CD Castellón

Dos equipos con dinámicas opuestas: los locales buscaban prolongar su racha de tres victorias consecutivas para meterse en puestos de ascenso directo, mientras que el Castellón visitaba uno de los campos más duros de la categoría con la esperanza de seguir puntuando y alejarse de la zona de descenso.

 

 

Mejores sensaciones del Castellón aunque la más clara para los locales

 

El choque entre Burgos CF y CD Castellón comenzó con ritmo e intensidad. Apenas habían transcurrido 36 segundos cuando los visitantes forzaron el primer córner del encuentro y en la posterior jugada llegó la primera tarjeta del encuentro para Israel Suero por cortar la contra.

 

Los de Pablo Hernández comenzaron con mejores sensaciones y, en el minuto 5, tras una gran jugada de Mabil por banda derecha, el extremo logró conectar con Cámara, que definió con acierto. Sin embargo, el ariete estaba adelantado y el asistente levantó el banderín dando así por anulado el gol.

 

La primera gran ocasión del encuentro llegó en el minuto 17. El Burgos dispuso de una falta en la semiluna del área que Curro ejecutó con maestría, colocando el balón en la escuadra y obligando a Matthys a realizar una espectacular estirada para desviarla a córner.

Los locales optaron por cederle el balón al Castellón, que dominaba la posesión sin generar grandes ocasiones de peligro, mientras esperaban salir al contragolpe. En el minuto 21, Fer Niño protagonizó una rápida transición, recorriendo medio campo y plantándose ante el portero, pero llegó algo cansado y su disparo se marchó por encima del larguero.

El partido se endureció al acercarse la media hora. Primero fue David González quien vio la amarilla tras derribar a Mabil en una zona peligrosa aunque el posterior disparo de la falta se estrelló contra la barrera. Tres minutos después, Iñigo Córdoba recibió también la cartulina por frenar una jugada prometedora, dejando a los dos extremos del Burgos apercibidos.

El Castellón embotelló al Burgos en su área durante varios minutos, y en el 35, Suero obligó a Cantero a realizar una buena parada tras un remate de cabeza dentro del área.

La polémica llegó en el minuto 41,el Castellón reclamó penalti por una acción en la que Córdoba desestabilizó a Calatrava cuando este se disponía a disparar. El árbitro consideró que el toque por detrás no era suficiente para señalar la pena máxima y el VAR corroboró su decisión tras unos segundos de revisión.

El primer tiempo terminó sin goles y sin tiempo añadido, con un Castellón más dominador y un Burgos que resistía replegado y buscando sus opciones a la contra.

 

Mucha igualdad pero poco espectáculo

La segunda mitad mantuvo la misma tónica que los primeros 45 minutos: un Castellón dominador, aunque sin generar ocasiones claras, y un Burgos replegado, buscando el contragolpe.

En el minuto 53, Morante remató al primer palo tras un córner botado por Curro, pero el balón salió rozando el poste.
Dos minutos después, Fer Niño aprovechó un desmarque a la espalda de Atienza, recibiendo un gran pase que transformó en un potente disparo que se marchó al lateral de la red.

Alrededor de la hora de partido, Ramis buscó piernas frescas desde el banquillo, retirando a los dos extremos que estaban apercibidos y dando entrada a Appin y Mollejo, sin alterar el esquema del Burgos.
Por su parte, Pablo Hernández tardó cinco minutos más en realizar sus primeras modificaciones, que sí implicarían un cambio de sistema, entraron Pablo Santiago y Jakobsen, sustituyendo a un central, Salva Ruiz, y al extremo Suero, apostando por un juego más ofensivo.

En el minuto 66, Morante volvió a probar a Matthys, aunque su disparo fue fácil para el portero, tras una rápida contra del Burgos.

 

La acción más destacada por parte de los visitantes en la segunda parte llegó en el 74, cuando Mabil, el jugador más activo del partido, filtró un pase raso a Cala, cuyo disparo fue rechazado a córner.
Tras este córner, el Burgos realizó otro doble cambio, incorporando a Fermín y a Sergio González por Curro y Brais para reequilibrar las marcas en defensas después de los recientes cambios ofensivos del Castellón. 

La grada, consciente de que su equipo necesitaba los tres puntos para aprovechar los pinchazos de sus rivales y meterse en puestos de ascenso directo, comenzó a desesperarse ante la falta de ritmo y la pasividad del conjunto local. Los aficionados, impacientes, pidieron a los suyos que dieran un paso al frente y mostraran más intensidad sobre el terreno de juego.

No obstante, en los últimos 10 minutos el partido no hubo grandes acercamientos, más allá de un centro de Lizancos que acabó en córner y un posterior remate de Ivan Morante que también atajó el portero visitante.

El árbitro añadió 3 minutos en los cuales el marcador no se movió dando por finalizado un encuentro en el que primó la igualdad pero faltaron los goles.

Con este reparto de puntos, el Burgos se coloca cuarto, a dos puntos por encima de los puestos de play-off y a solo uno del Deportivo de La Coruña, que marca la zona de ascenso directo. El próximo domingo, los burgaleses afrontarán un nuevo derbi castellano a domicilio frente al Mirandés.
Por su parte, el Castellón suma 16 puntos y se sitúa en la duodécima posición, aunque únicamente a dos del Granada, que marca el límite del descenso. Los albinegros recibirán al Sanse en Castalia el sábado siguiente, en un duelo directo por la salvación.