En una noche emblemática, marcada por la vuelta del Real Oviedo a Primera División tras más de dos décadas, el Real Madrid conquistó el Estadio Carlos Tartiere con una actuación brillante que selló una victoria por 0–3. Kylian Mbappé firmó un doblete (37′ y 83′) y Vinícius Júnior, entrando desde el banquillo, sentenció el duelo con una diana en el tiempo añadido.
El partido fue dominado desde el pitido inicial por los merengues. La presión alta y el control del balón fueron los ejes del planteamiento de Xabi Alonso, quien introdujo varios cambios notables en el once: Rodrygo y Franco Mastantuono fueron titulares por delante de Vinícius para favorecer la rotación de un equipo que ya busca equilibrio ante la congestión de calendario.
Mbappé marcó la diferencia
El Oviedo tuvo el susto inicial cuando un pase largo sorprendió a la defensa visitante, pero Thibaut Courtois respondió con seguridad. Con el paso de los minutos, el Madrid empezó a imponer su ritmo y llegaron las primeras ocasiones. Un disparo de Rodrygo estuvo a escasos metros de abrir el marcador. La creciente superioridad blanca culminó en el primer gol, tras una recuperación limpia de Tchouaméni, un buen pase de Arda Güler y la ejecución exacta de Mbappé. En esa fase, Güler se mostró incisivo con ocho pases clave, moldeando el ritmo ofensivo del equipo.
Vinicius vuelve a mostrar su mejor nivel
El segundo tiempo mostró un bajón de intensidad por parte del Madrid, lo que permitió al Oviedo cobrar mayor protagonismo ofensivo. Kwasi Sibo rozó el empate con un derechazo que impactó en el palo. Sin embargo, poco duraron los buenos minutos locales.
La entrada de Vinícius cambió el partido. Robó un balón en campo contrario y sirvió otro pase magistral a Mbappé, quien firmó su doblete con frialdad (83′). El brasileño cerró la cuenta en el descuento desde el interior del área, tras una contra coordinada.
Xabi Alonso, satisfecho
Al término del partido, Xabi Alonso celebró la solidez física de Mbappé, que ha recuperado cuatro kilos tras su participación en el Mundial. También destacó la cohesión del grupo y la integración de jóvenes como Mastantuono.
La victoria refuerza el inicio perfecto del Real Madrid en Liga, destacando la profundidad de plantilla y su capacidad de ajuste táctico. Ya piensan en el próximo desafío: recibir al Mallorca en el Santiago Bernabéu.